top of page

Salir reforzado de un concurso de acreedores

La reciente, larga y profunda crisis padecida en España nos ha dejado muchas lecturas. YYo me quedaría con que el empresario español se ha dado cuenta de lo importante que es reconocer la fase que atraviesa su empresa (dificultad financiera en su caso), y que eso no es sinónimo de fracaso, sino de que es el momento de ponerse a trabajar para salir airoso de la situación. Haciendo lo propio en el momento oportuno, hay muchas más posibilidades de levantarse saliendo fortalecido..


Ejemplos de salidas exitosas podemos ver en este artículo sobre la evolución de Pescanova, sumida en un mar de dudas, pero también conocemos historias recientes de superación tras etapas de gran dificultad como en Dhul, en Elgorriaga, Apis, Cacaolat, Marco Aldany, en la Zinkia de Pocoyó, o en la lucha incansable de los accionistas de Bimbo Panrico para dejar atrás sus dificultades financieras.



La cultura americana ha sido consciente de la importancia de saber reponerse de los reveses que nos depara el destino, y un empresario no era considerado de éxito si no había superado una crisis o una quiebra. En España sin embargo, solicitar un concurso de acreedores era considerado un fracaso profesional y hasta personal!


Por esta mentalidad ha sido muy frecuente entre la clase empresarial española no reconocer las dificultades de sus compañías hasta que era demasiado tarde. Es más, era algo habitual tratar de sacar músculo comprando otras compañías mediante apalancamiento, para engañar al competidor y no mostrar síntomas de debilidad… ¡Qué error endeudarse adquiriendo compañías deficitarias, cuando la propia estaba en peor situación!


Esto derivaba en procesos concursales mucho más traumáticos, con alta probabilidad de calificación de concurso culpable, e incluso de carácter fraudulento, y de llevar a la sociedad a su liquidación.


Reconocer una situación de crisis implica, simplemente, conocer exactamente la situación de la empresa, de sus áreas de negocio, saber qué ha llevado a la empresa a esa situación para, posteriormente, trabajar sobre este conocimiento: cortar las áreas de negocio deficitarias, racionalizar el gasto, desinvertir en caso conveniente y, de encontrarse en situación concursal, comunicar la situación de insolvencia y el preconcurso y el concurso de acreedores con decisión si no ha sido posible la negociación con acreedores. ¡El concurso no es el fin, sino un camino para salir fortalecidos!


Si desea más información sobre cómo salir de una situación de iliquidez, puede poner en contacto con nosotros mediante el siguiente formulario y nos pondremos en contacto con usted en menos de 24 horas, guardando la más absoluta confidencialidad.


http://www.elmundo.es/economia/2018/01/20/5a589fd6468aeb7d418b4579.html





Entradas destacadas
Entradas recientes
Archivo
Buscar por tags
No hay tags aún.
Síguenos
  • Facebook Basic Square
  • Twitter Basic Square
  • Google+ Basic Square
bottom of page